martes, 26 de julio de 2011

Cambia con el tiempo el amor?

Alguien me hacía esa pregunta hoy, ¿cambia con el tiempo el amor? Pues resulta que sí. Generalmente partimos del enamoramiento, esa sensación indescriptible que nos hace sentir mariposas, ilusionarnos, hacer planes, etc. En ocasiones se llega a idealizar al "ser amado", pero lo cierto es que nos cegamos y no tenemos ojos para nadie más, incluso, no tenemos ojos para ver sus defectos. Con el tiempo y luego de conocernos mejor, algunas cosas pueden volverse cotidianas, y sobre la cotidianidad empezamos a discutir sobre esos temas en común pero en los que a veces llegamos a tener diferencias de opinión; pueden ser metas, objetivos, formas de administrar las cosas en común, o cosas más simples como la crema dental, las medias por fuera del canasto, etc. Amamos más con la razón que con el estómago y el corazón y resulta que cuando la pareja nos hiere el ego se abre la brecha entre los dos. Las peleas por quien tiene la razón en ocasiones resultan inmamables (insoportables). Entonces, es tiempo de afrontar la relación desde el punto de vista del amor y no del enamoramiento, ya no vas a sentir mariposas y debes ser consciente de que debes aceptar a tu pareja con las virtudes y defectos con los que lo aceptaste cuando empezó la relación, sin embaro, esto no significa que las cosas que ambos puedan modificar de su relación deban quedar -por terquedad- sin resolverse. Apuesta, si puedes cambiar, cambia.
El amor con el tiempo madura y desde la razón es posible solidificar la relación. Si buscas enamorarte constantemente y vivir de mariposas en el estómago, muy probablemente cambies de pareja con demasiada frecuencia.
Lo más importante es no ser monótonos, sorprenderse mutuamente, alimentar y construir la relación dirariamente.

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